Gengis Khan


Temudjin (Gengis Khan)

Nacido en 1162 en las proximidades del lago Baikal, era hijo de Yesugei, cabecilla de los Kiyat, una pequeña tribu nómada del Este de Mongolia, vasalla del Imperio chino.

De nombre auténtico Temudjin, sus seguidores le otorgaron el título principesco de Gengis Khan.

Huérfano a los diez años, pasó a formar parte del servicio del señor de los Kereit, Ong Qan Togril. A los trece años se convirtió en jefe tribal y, tras derrotar a los merkits y a los tártaros, se proclamó gobernante de la Mongolia oriental en 1203 y de la occidental en 1206. Agrupó en torno a sí a las diferentes tribus mongoles, lo que le facultó para emprender la guerra contra el poderoso imperio chino, llegando hasta las puertas de Beijing en 1211 y obligando al emperador Si-Hia a declararse vasallo suyo. Su marcha victoriosa obligó a China a firmar la paz, si bien la guerra se reanudó en 1215, tomando Beijing y conquistando las áreas central y meridional de China. Intentó entonces extender sus dominios hacia el oeste, logrando invadir regiones como el Kharizim, Turkestán, la Tranxosiana, el Khorasan y el Quersoneso entre 1218 y 1225.

El Imperio Mongol

Los mongoles, nómades de las estepas eurasiáticas, fundaron en el siglo XIII, bajo el liderazgo de Gengis Khan, el mayor imperio de la historia.

Eran una tribus de jinetes nómadas de las estepas del Asia Central; su lugar de origen coincide aproximadamente en la actualidad con la república de Mongolia y las franjas meridionales de Siberia. En el siglo XIII, bajo el liderazgo de Gengis Khan protagonizaron un movimiento de expansión de tal magnitud, que el imperio mongol llegó a extenderse desde China por el este, a Rusia y el imperio islámico por el oeste.

Los pueblos mongoles pertenecen al amplio grupo de pueblos mongoloides, del que también forman parte chinos, japoneses, coreanos, thais, etc. Su medio geográfico configuró una forma de vida nómada, basada en el pastoreo de cabras, ovejas y caballos, muy similar a la de otros pueblos esteparios, como los turcos y los tunguses (manchúes), con los que también comparten una filiación lingüística (lenguas uralo-altaicas). Agrupados en tribus, vivían en tiendas que transportaban consigo en sus desplazamientos en busca de nuevos pastos, no practicaban la agricultura ni tenían ciudades o asentamientos permanentes. El chamanismo y la veneración de los fenómenos naturales constituían sus principales prácticas religiosas.