Godofredo de Bouillon

Godofredo de Bouillon
Godofredo de Bouillon fue Duque de la Baja Lorena y primer Rey de Jerusalén, hijo de Eustaquio II, Conde de Boloña, y de Ida, hija de Godofredo el Barbudo, duque de la Baja Lorena. Nació probablemente en Boulogne-sur-Mer en 1060 y murió en Jerusalén, el 18 de julio de 1100.

La historia de los primeros años ha sido distorsionada por la leyenda, según la cual mató con sus propias manos al anti-rey Rodolfo de Suabia en la batalla de Moelsen (1080) y fue el primero en entrar en Roma después de que hubiera sido sitiada por Enrique IV (1084). Lo que sí parece seguro es que fue elegido como sucesor de su tío Godofredo el Jorobado, duque de la Baja Lorena, asesinado en 1076. Pero Enrique IV tomó Lorena, dejando a Godofredo solamente el marquesado de Amberes. Como vasallo del Sacro Imperio Romano Germánico, Godofredo apoyó al ejército de Enrique IV en la Guerra de las Investiduras y siguió al emperador en su expedición a Italia contra Gregorio VII (1080-1084). Entretanto se vio obligado a regresar para defender sus posesiones que habían sido atacadas por el Conde de Namur y hacia 1089, Enrique IV le devolvió la herencia de Godofredo el Jorobado nombrándole Duque de la Baja Lorena.

 
En aquellos tiempos todo el norte de Francia fue avivado por la encíclica de Urbano II que suplicaba a la nobleza de Flandes acudir a la Cruzada. Godofredo fue uno de los primeros en tomar la cruz junto con sus dos hermanos, Eustaquio y Balduino (1096) y con el fin de obtener recursos vendió o empeñó muchas de sus posesiones. Muchos nobles se pusieron inmediatamente bajo la misma bandera y alrededor del 15 de agosto de 1096 partió al mando de 10.000 caballeros y 30.000 soldados de a pie. Su ejército lo componía valones y flamencos.

Después de algunos problemas en Hungría, donde fue incapaz de impedir que sus hombres hicieran correrías entre los cristianos del lugar, llegaron a Constantinopla en noviembre de ese año. Fue el primer cruzado en llegar, y así empezaron los conflictos con el emperador bizantino Alejo I, ya que éste quería que Godofredo jurara lealtad al Imperio Bizantino, lo que suponía que las ciudades que fueran conquistadas deberían ser devueltas a este Imperio. Godofredo, finalmente, llevó a cabo el juramento de lealtad en 1097, al igual que hizo el resto de jefes de la cruzada conforme fueron llegando.

Godofredo fue el primero en llegar al cerco de Nicea, y estaba en el contingente principal de los Cruzados, cuando éste se dividió en dos después de la toma de Nicea, división que se debió realizar para facilitar las tareas de aprovisionamiento. Ayudó a la vanguardia del ejército durante la batalla de Dorilea durante el ataque realizado por los turcos selyúcidas guiados por Kilij Arslan I, apoyando a otros cabecillas cruzados entre ellos a Bohemundo de Tarento consiguiendo con ello la victoria final, para pasar posteriormente al saqueo del campamento selyúcida.

En 1099, tras la captura de Antioquia después de un largo asedio, los cruzados se dividieron en dos partes, indecisos sobre el paso siguiente a realizar. La mayoría de los soldados de a pie querían continuar hasta Jerusalén, pero Raimundo el más poderoso de los príncipes dudaba sobre si seguir adelante o no, Bohemundo de Tarento decidió permanecer en Antioquía como príncipe titular de esta ciudad. Después de meses de espera, los soldados de a pie urgieron a Raimundo para que continuara el camino a Jerusalén, y una vez iniciado este camino Godofredo se unió rápidamente a ellos. Tomó parte activa en el asedio de esta ciudad, y el 15 de julio fue el primero en entrar en la ciudad, entrada a la que siguió una masacre de musulmanes y cristianos nativos. El 22 de julio, al rehusar Raimundo a ser Rey de Jerusalén, Godofredo fue elegido en su lugar.

Escudo de Armas del Reino de Jerusalén

No obstante Godofredo no quiso ser coronado rey de la ciudad en la que Cristo había muerto. En su lugar tomó el título de Sancti Sepulchri advocatus, abogado o defensor del Santo Sepulcro. Durante su corto reinado, apenas un año, Godofredo se vio obligado a defender el nuevo Reino de Jerusalén de los ataques de los fatimitas de Egipto, a los que derrotó en la Batalla de Ascalón en agosto de 1099.

Godofredo murió en 1100. Su hermano y sucesor, Balduino I, se inclinó claramente por una monarquía secular al estilo de las de Europa occidental. Balduino no era tan escrupuloso como su hermano, y se hizo coronar Rey de Jerusalén.

Según el cronista árabe Ibn al-Qalanisi, durante el asedio de Acre, Godofredo, gobernador de Jerusalén, fue alcanzado por una flecha que le produjo la muerte. Las crónicas cristianas no mencionan nada de esto, al contrario, Alberto de Aquisgrán y Ekkerhard de Aura dicen que Godofredo contrajo una enfermedad en junio de 1100 en la ciudad de Cesárea a resultas de la cual murió. Más tarde se dijo que el Emir de dicha ciudad lo envenenó, pero al parecer este rumor no tiene base alguna; Guillermo de Tiro, en la crónica que escribiría en el siglo XII no dice nada sobre este tema. Se desconoce la causa de su muerte. Murió el 18 de julio, habiendo nombrado a su hermano Balduino como su sucesor. Fue enterrado en la iglesia del Santo Sepulcro. La tumba de Godofredo fue destruida en 1808, pero en aquella época todavía pudo verse una gran espada que se decía haber sido la suya.

Luego de su muerte, pasó a ser el héroe de las canciones de gesta, como lo habían sido antes Carlomagno y Rolando.



No hay comentarios: