El Arca de la Alianza



 El Arca de la Alianza era un objeto sagrado de la tradición judía, que aparece en la Biblia; y presente igualmente como objeto sagrado en la religión de la Iglesia ortodoxa etíope.

Se trataba de una caja o arca que contenía las dos tablas (los Mandamientos) que, según la Biblia, fueron escritas por Dios mismo y entregadas a Moisés en el Monte Sinaí, la vara florida de Aarón y un vaso de maná. Se guardaba en el Templo de Jerusalén y se llevaba al frente de batalla cada vez que había una guerra. El Arca simboliza la unión de Dios con el pueblo, a ello debe su nombre. Se cree que desapareció con la destrucción del templo de Jerusalén.
 
Según se detalla en la Biblia, el Arca estaba hecha de madera de acacia negra, revestida por dentro y por fuera con láminas de oro puro. Medía 2,5 codos de longitud y 1,5 de ancho y alto, o sea 1,31 m de largo por 0,78 m de alto y ancho. Una guirnalda de oro la rodeaba en su parte superior. A ambos lados llevaba fijos cuatro anillos de oro a través de los cuales se insertaban dos pértigas de acacia recubiertas también de oro. Sobre la tapa del cofre o propiciatorio descansaban dos querubines, igualmente dorados. Estos querubines extendían las alas con tendencia a tocarse las puntas de modo que el espacio que quedaba entre las figuras y el propiciatorio forma un triángulo sagrado. Ese espacio abierto se llamaba oráculo mediante el cual se comunicaba Yahve (Dios).

El Arca estaba situada en el sancta sanctorum o lugar más sagrado del tabernáculo o del Templo. Era una manifestación física de la presencia de Dios y fue un medio eficaz para mantener a los judíos lejos de la idolatría. Su transporte y cuidado estaba reservado a la Tribu de los levitas. Abría la marcha durante los años de expedición por el desierto y estaba siempre a la cabeza del pueblo. Al plantar el tabernáculo un velo la separaba del santuario, y al levantar la marcha, los levitas la envolvían en aquel velo. Todo iba envuelto en una piel teñida de azul y en otra de color jacinto.


Tras la destrucción del templo de Salomón, el arca desapareció. Actualmente existen diversas teorías sobre la ubicación actual del arca de la alianza. La versión más aceptada es que está guardada en una iglesia de Etiopía. Esta teoría se basa en relatos pertenecientes a la iglesia cristiana Copta en Etiopía, que indican que el arca de la alianza habría sido trasladada secretamente hacía más de 1000 años.

Cuenta la Biblia que en tiempos de Salomón, la Reina de Saba visitó Jerusalén atraída por la sabiduría de su Rey. La Reina de Saba comenzó a ejercer una irresistible atracción sobre el hijo de David, quien pese a sus riquezas e inteligencia no lograba seducir a la bella soberana. Llegaba la hora de su partida a Saba y Salomón consiguió arrancarle una promesa: que en el caso de que se llevase consigo algún bien preciado del reino, consentiría a cambio yacer con él una sola noche. La víspera del viaje, Salomón ofreció a su invitada una cena de exquisitos manjares. Astutamente ordenó que se sazonaran con abundante sal y picantes especias. Tras los postres, la reina tuvo que beber abundante agua para calmar la sed. ¡Qué bien es el más preciado sino el agua! Rota la promesa, la reina de Saba cumplió y de aquella única unión nació Menelik I, futuro rey de Etiopía.

Relatos indican que años más tarde el joven Menelik fue enviado para recibir educación a casa de su padre en Jerusalén. Pocos años después, a pesar de los esfuerzos de Salomón para que su hijo se quedara, Menelik regresó a Etiopía.
  La tradición cuenta que, seducido por sus ayudantes, se llevó consigo el Arca.
Permaneció primeramente en un templo en la isla de Elefantina cerca del río Nilo. Luego se relata cómo el Arca de la Alianza habría sido colocada en una especie de tabernáculo en la isla de Tana Cherkos (Tana Kirkos), ubicada en el lago Tana, donde permaneció durante 800 años.

Luego el rey Ezana de Etiopía decidió trasladar el arca a Aksum, siendo finalmente guardada en la Iglesia de Nuestra Señora de Sión. Según los etíopes, es el lugar en donde hasta hoy en día aún permanece y es cuidada por un sacerdote. Este sacerdote, según sus tradiciones, sería un descendiente de uno de los levitas, quienes ayudaban a trasladar y cuidar el arca en sus viajes. Es la única persona a quien se le permite ver el Arca de la Alianza, al igual que ocurría con los levitas según la tradición judía; es por ello que no se ha podido ratificar su permanencia real en esta iglesia, aunque todas las pruebas arqueológicas indicarían que esta teoría sería auténtica. Entre las variadas pruebas arqueológicas, hay reliquias pertenecientes al pueblo judío de la época del arca, y que pertenecerían al templo de Jerusalén. Esta teoría además se sustenta en que extrañamente el Arca es el punto central del culto y la adoración cristiana en Etiopía: cada uno de los 20.000 templos de Etiopía contiene un réplica del Arca de la Alianza.


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3 comentarios:

Anónimo dijo...

por favor cuenten mas detalles por que si no cuando tengamos que hacer trabajos no hay la suficiente inforamacion, lo se por experiencia


gracias. Disculpen las molestias

Gustavo dijo...

Amigo, gracias por leer el artículo. Este blog sólo pretende despertar tu interés por algunos temas, no reemplazar tu tarea de investigación. Me gustaría que pudieras aportar comentarios sobre éste y otros temas del blog.
Gracias

Anónimo dijo...

Hola! muy bueno, estos es genial, porque los que tenemos poca informacion de la epoca en que Vivio el Adorado Jesús
adelante
garacias cariño Leonor